El sector agrícola tiene una importancia de alto nivel para la sociedad; esto es indiscutible. Todos dependemos de la alimentación, es la necesidad básica que tenemos diariamente. Sin embargo, hace apenas 10-15 años la mayor parte de los inversores veían las inversiones en el sector agrario en Europa como una actividad de alto riesgo y poca rentabilidad.
En los últimos años la situación ha cambiado considerablemente. La cantidad de fondos que buscan invertir en el sector agroalimentario se ha multiplicado por quince (!). Uno de los aspectos más importantes que atrae a los inversores en este sector, es el aumento continuo de la demanda de alimentos, ya que según diferentes estimaciones la producción de la alimentación crecerá entre un 60% y un 70% para ser capaz de alimentar a la población mundial en los años 2050 (9.000 millones de personas aproximadamente). Otro aspecto igual de importante es que el sector agroalimentario arroja datos económicos bastante sólidos, porque no es común invertir en un sector que ofrezca rentabilidades tan altas de hasta un 15%. No olvidemos también las oportunidades de crecimiento, subvenciones de la Unión Europea y fuentes sostenibles que hacen el sector agrícola tan atractivo para los inversores.
Si hablamos de España en concreto, según diferentes informes de consultores, gracias a sus recursos hídricos (además de su alta disponibilidad -más de 4 millones- de terrenos de regadío) y su suave clima mediterráneo (la mayor cantidad de días soleados posible y las temperaturas elevadas durante casi todo el año, dependiendo de la zona), la Península Ibérica últimamente ha atraído de nuevo a los inversores agrícolas internacionales. Dada la oportunidad y ventaja de las inversiones en productos agrícolas como los frutos secos, los cítricos, las hortalizas, el vino, el aceite de oliva y otros cultivos de frutas y verduras.
En los últimos años en España se han registrado varias grandes operaciones de fusión y adquisición, la mayor parte de las cuales fue por la iniciativa de fondos de capital privado y el valor de las cuales varía dependiendo de la región y del tipo de cultivo. El Gobierno de España demuestra igualmente su interés y apoyo en el sector agrario y por eso plantea destinar 345 millones para fomentar la modernización, la competitividad y la bioseguridad hasta el año 2023.
A día de hoy, existen varias propuestas en el mercado por parte de fondos de inversión sobre las nuevas plantaciones y sus nuevas tecnologías avanzadas de plantación y crecimiento. Estas propuestas son muy atractivas para el mercado de los frutos secos, donde los almendros se ponen en el primer lugar, como la nueva plantación del futuro junto con los olivos. En la lista están también la avellana, el aguacate, el pistacho, la nuez, el anacardo etc. A parte de los frutos secos, obviamente, hay muchas propuestas de nuevas plantaciones de otros frutales, como los naranjos y por supuesto el sector vitivinícola.
Gracias a la nueva tecnología empleada en las nuevas plantaciones, se puede aumentar 10-20 veces más la cantidad de árboles por hectárea y entonces la cantidad de kilos de cosecha por hectárea multiplica la rentabilidad del proyecto. La mayor ventaja de estos proyectos, sin duda, es que ofrecen todo el sistema de asesoramiento que incluye no solamente el análisis de cifras, sino también toda la metodología de la plantación y del crecimiento.
De hecho, una de las fases imprescindibles en las nuevas plantaciones es la sujeción del cultivo al tutor. La mejor solución que se puede encontrar es, evidentemente, la goma ancla, que tiene varias ventajas indiscutibles. Primero es que NO estrangula, se estira hasta 4 veces su tamaño, evitando heridas y garantizando el crecimiento del fruto. Es fácil de colocar con las manos incluso llevando guantes, con lo cual NO necesita herramientas especiales. Es muy resistente, por lo cual apta para soportar todas las inclemencias meteorológicas, fuertes rachas de viento y tiene una duración de más de 5 años en la planta. Es reutilizable, ya sea para una nueva cosecha o acompañar a la planta durante su crecimiento. La goma ancla es compatible con todo tipo de cultivos a diferencia de las atadoras automáticas cuyo uso está más limitado al guiado de los sarmientos en las vides. Se puede atar y despreocuparse ya que existe una medida compatible para cada plantación, por ejemplo: viñedos, olivos, frutales, etc. Por eso la goma ancla es fundamental para sujetar el tronco al tutor y para el cierre del protector.
Si se dedica a las nuevas plantaciones, la goma ancla de nuestra marca Bandex será su principal aliado, ya que podrá asegurar su planta al tutor además de cerrar el protector. La goma ancla resiste las fuertes rachas de viento e inclemencias meteorológicas. Se adapta al crecimiento de la planta sin causar heridas, pero sujetando firmemente.
No dude en pedirnos información sin compromiso, contáctenos a info@bandex.net o llámanos a +34 965 10 76 03, le asesoraremos sobre cómo sacarle el máximo rendimiento a su nueva plantación y obtener los mejores resultados.
